Tengo la suerte de vivir muy cerca de una de las ciudades más bonitas del mundo: Barcelona. Me siento muy orgullosa de ello.
Mi ciudad natal y donde resido, L'Hospitalet, comparte comarca y linda con ella. Está a muy corta distancia del centro de la ciudad catalana.
Desde mi casa, a tiro de piedra, el palacio de Montjuic, presidiendo e iluminando el cielo de la señorial Plaza España.
Barcelona hoy está especialmente guapa. Toda ella en su conjunto.
Guapa, guapa y guapa.
Luce el sol que reina en toda la Península, sí. Pero aquí lo hace con matices especiales. El azul, el blanco y el dorado que nos llega de su costa. El gris, el blanco y el multicolor de su asfalto.
Apetece embriagarse de toda ella y así hemos pensado todos aquellos que nos hemos lanzado hoy a sus acogedoras, variopintas, elegantes, vanguardistas, históricas, actuales y ancestrales calles para disfrutar deambulando, en un día de fiesta, sin más objetivo que dejarnos llevar por este otoño que se resiste a instalarse.
(Imagen: franjarquitectura.com.ar)
Barcelona es una ciudad con encanto, con duende, en la que te puedes perder soñando despierto y disfrutando de su belleza, porque siempre hay algún rincón bello que descubrir
ResponderEliminarTe seguimos
un beso
Lourdes
Gracias, Lourdes.
ResponderEliminarQue belleza!!! como sera poder recorrerla, woooo una maravilla y un placer poder admirar estos parajes, mientras alguuun dia.....
ResponderEliminarUn abrazo!!!!