Estando de paso, de prestado,
(efímero camino el nuestro),
a nada ni a nadie permito
pintarme una noche de blanco.
A la luz de mis noches,
colores (oscuros o claros),
lazos irrompibles, amados y honestos.
Espectros de paso,
fantasmas falsos,
caducos a un tiempo,
cuando os veo me alegro,
ya no os temo.
Empañar vuestras sendas,
que es corto el camino,
que aquí la que escribe no tiene más fondo
que el pasar por la vida de forma natural,
sin dobleces...
como un yogurt blanco.